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Daniel Rodríguez
{ "tags" : [ "analysis" , "economy" , "society" , "spanish" , "thoughts" ] , "title" : "Siendo Objetivos" }

Hola de nuevo, un gusto escribirles, no sin dudas, bueno, ¿cómo no dudar si hay tanto que desconozco?

Desde hace un tiempo vengo pensando en el significado de la expresión, o la necesidad de expresarnos, en parte desde que leí un poema del viejo y atrevido Bukowski, llamado “El Genio de la Muchedumbre”, donde apunta que hay que tener cuidado con los predicadores, pues estos son los primeros en hacer lo contrario a lo que profesan. Su publicación me hizo meditar en las muchas ambivalencias que ocurren a diario en el bullicio, incluso me hizo reír, debido a los oxímorones de aquellos cuyas pretensiones contrastaban en su totalidad con sus cargos, es decir, hay pocas cosas tan despreciables como que un millonario a costa de corrupción te hable sobre lo bien que vive el pobre, es tan gracioso. Pero bueno, el asunto es que la expresión en sí misma parte de la necesidad, de hecho su etimología deja ver a simple vista que se trata del resultado de la presión que se ejerce, es decir, es lo que ya no podemos contener y dejamos salir.

La expresión comienza temprano en nuestro desarrollo, hacemos ruido para llamar la atención de nuestros padres, para que nos asistan, y así continúa en adelante, cuando hay algo que no sabemos cómo solucionar lo expresamos, para buscar ayuda, difícilmente decimos lo que ya aceptamos por omisión, es decir ¿qué tantas veces hablamos del aire?, ¿o de que estamos respirando en todo momento? (¡Ajá! Les hice pensar en su respiración :3), tomando un ejemplo personal, dedico mi vida a hacer cosas de computadoras y aquí no publico nada al respecto, ¿por qué?, pues, por dos razones, una: me cansa el tema, y dos: mientras más se, me doy cuenta de que puedo decir menos al respecto.

Les escribo aquí porque quiero comunicarles mi opinión sobre las cosas que no puedo resolver con mis manos.

Para defender el punto de que la expresión surge de una necesidad, primero quiero descartar la enseñanza como justificación de lo contrario: la enseñanza es una forma de expresión para comunicar a otros el resultado de la experiencia y prepararlos para el porvenir, desde este punto se ve provechosa, pero realmente es un desgaste, imagínense, si dedicarnos a estudiar es un fastidio, ¿cómo será enseñar? y digo que es un fastidio porque requiere disciplina y suficiente carácter como para imponer prevenciones a futuros distantes sobre cualquier placer inmediato, es decir es costosa, y para muestra el elevado costo de la educación.

De hecho, no es de extrañar que en un país con tantos problemas económicos (como este, en donde escasean medicinas, alimentos básicos e incluso papel toilet) los sectores educativos financiados por el estado estén en tantos problemas (Busquen en twitter: #SOSunivVE), es demasiado costosa la educación como para preocuparse primero en ella, igual que hay tan pocos nerds en los colegios, sencillamente la mayoría se deja llevar por los beneficios a corto plazo.

Desde hace un tiempo vengo pensando que los que defienden ideologías políticas centrales son los más educados de la población, es más, me atrevería a decir que no sólo tienen suficientes recursos como para pagar todas las necesidades básicas más la educación, sino que tienen como para estudiar más allá de su profesión y pensar en comprender otros mundos, y para esto hace falta mucho más que dinero, se necesitan buenos ejemplos, buenos padres y educadores, es decir bases culturales fuera de lo común.

Se necesita mucha educación para saber respetar, sin ella, cualquier propuesta tiende al totalitarismo, porque ve la incomprensión como un camino más eficiente, porque le parece que pensar en el futuro es demasiado desgaste.

¿Es el humano propenso a desvalorar todo lo que le da bienestar y destruir las bases de la sociedad?, o ¿es el humano violento en sí mismo? Sin duda somos una especie dominante, pero ¿tan malos somos?

Creo que no, considero que es un asunto natural, es decir, todo lo que somos depende del entorno, de lo que constituye nuestro ambiente, de hecho, no hubiésemos podido existir sin él, es más, propongo empezar a pensar que el ser humano es parte de su ambiente, como las pecas en la piel, somos parte de la naturaleza, nunca distintos de ella.

Uno de los conceptos que se han (a)grabado en la percepción popular es el de "adaptación" y "evolución", la gente cree que la vida cambia y evoluciona, tipo pokémon, cuando no es así, los cambios son mínimos, ocurren en su mayoría durante la gestación, durante la multiplicación de células, y sólo se notan porque los que no tienen esos cambios, mueren.

La naturaleza tiene más fácil acabar con la vida que construirla, y para muestra la cantidad de seres vivos que hemos extinto nosotros.

El asunto es que todo tiene su razón de ser en los recursos y menos en lo que nosotros idealizamos como correcto.

Uno puede ser idealista en cuanto a qué es lo mejor a largo plazo, incluso desde un punto de vista matemático, analizando la distribución y el aprovechamiento eficiente de recursos, pudiendo añadir variables sociales, además de los deseos de la población y del individuo, y aún así sería muy difícil entender, en números, cómo desembocará la cultura, porque va más allá de la percepción objetiva de los fenómenos naturales, los asuntos económicos son ampliamente afectados por la percepción de valor de los agentes, podría decirse que depende más de cómo cada quien entiende que son las reglas del juego que de planificación.

Y esta es la explicación a prácticamente todo (porque lo demás no es práctico).

La población se acumula entorno a los recursos, dependiendo qué tan fácil los puedan obtener, habrán más conflictos, para muestra la capacidad de orden de los Japoneses, que se la pasan sobreviviendo problemas naturales, o bueno, la estabilidad en las sociedades nórdicas, es decir, la adversidad crea cultura de respeto y colaboración, y por el contrario, la plena disposición de recursos desvirtúa esos valores (para muestra, el caribe, los países petroleros y La India).

Alguien alguna vez tuvo el coraje de decirme que en sociedades con recursos a plenitud, el ser humano buscaba la manera de generar adversidades para establecer orden, y me parece razonable, aunque no es que se busque, más bien así somos.

Podríamos decir que el motivo del surgimiento de los movimientos opresivos es la escasez, o bueno, en los países desarrollados, una versión más ligera de control serían los movimientos republicanos, que quizás tienen su motivo en: la recesión y la guerra, entender que se deben tomar medidas de austeridad para afrontar el futuro, va más allá del complacer a la sociedad. O bueno, en donde hay más recursos que conflictos, se ve como injusto no utilizarlos para garantizar el beneficio de todos y surgen los movimientos sociales moderados, y en donde hay demasiados recursos, ocurre la anarquía, que toma rostros temporales de personajes populares, pero que en esencia es, realmente, oclocracia.

Es así como se constituye la humanidad, donde hay oportunidad, nos colamos, como hielo que se derrite, y donde hay adversidad, nos estructuramos, como agua que se hace hielo.

Entonces, cada región tiene el gobierno que se merece, y los cambios habrán a través del tiempo, por cómo se someta la sustancia a su recipiente y por el grado de desorden que caracteriza a esta realidad.

Teniendo las cosas un poco más objetivas, nosotros, los intelectuales, los estudiosos, debemos analizar de qué manera sobrevivir y usar nuestro aprendizaje para ver lo más adelante posible, ¿dónde hay oportunidad para nosotros?, ¿cómo aprovecharlas?, ¿cómo ser de utilidad?, saquemos el ruido de nuestro análisis, entendamos que todo discurso tiene raíz en necesidades desbordantes y en oportunidades sabidas, despersonalicemos los conflictos y participemos en donde podamos tener garantía de que nuestras acciones serán lo más profesionales posibles.

Después de todo, se dice que el conocimiento es poder no porque sea un lujo, sino por su capacidad de resolver conflictos, incluso mucho antes de que ocurran.

No veo sentido en perder tiempo en términos idealistas cuando hay tanto práctico por hacer.

Los "malos" de la historia son los que obtienen resultados negativos. Porque nadie se expresa o se manifiesta sin pretender que eso resultará en algún beneficio, ¿no es así?.

Muchas gracias. Algunas conversaciones interesantes:

by-nc-sa Daniel Rodríguez.